"Muchas veces ha estado usted muy cansado de la vida; usted se afanaba por
salir de aquí, ¿no es verdad? Anhelaba abandonar este tiempo, este mundo, esta
realidad, y entrar en otra realidad más adecuada a usted, en un mundo sin tiempo.
Hágalo usted, querido amigo, yo le invito a ello. Usted sabe muy bien dónde se oculta
ese otro mundo, y que lo que usted busca es el mundo de su propia alma. Únicamente
dentro de su mismo interior vive aquella otra realidad por la que usted suspira. Yo no
puedo darle nada que no exista ya dentro de usted. Yo no puedo presentarle ninguna
otra galería de cuadros que la de su alma. No puedo dar a usted nada: sólo la ocasión,
el impulso, la clave. Yo he de ayudar a hacer visible su propio mundo; esto es todo."
Herman Hess ("El lobo estepario")
Sumergido en dudas eternas y respuestas efímeras camino errante por una vereda llena de fantasmas que me chocan y nublan mi tranquilidad.
Al ver esta patética situación decido frenar para recobrar fuerzas y elaborar un majestuoso plan de escape, esos de los que estoy tan acostumbrado a realizar y que me salen tan bien. Todavía recuerdo como pude escapar de esa reunión familiar, donde reinaban las tartas de manzana, las agujas de tejer y las tías molestas que arreglaban casamientos con nietas de amigas que nunca habían sentido aunque sea el amargo perfume de la vida.
Bien, comencemos; estoy parado en una esquina a las 12:15 del mediodía, una multitud exasperada emite sonidos guturales y realiza danzas diabólicas, “es mi primer gran amenaza” pensé.
Al instante los reconocí, no pertenecen a ninguna tribu africana umbanda, solo son adolescentes recién salidos de la escuela, pero puedo asegurar que no están alejados ni un poco a mi primera impresión. ”Sigamos”.
Puedo ver a varias parejitas que están abrazadas demostrando su frenético amor, descontroladamente…
“Por favor, ¿Qué me pasó? ¿Frenético amor? ¿Descontroladamente?, demostrando su PASION.”
Puedo identificar un dejo de frialdad en mi ser, una sensación de endurecimiento crónico, ya no siento como antes, es más, creo que ya no siento.
Las flores no tienen aromas ni colores, los pájaros emiten un canto mudo y la mayor parte del día es oscuro, sin luz ni calor. En eso me convertí; En un extraño personaje vacío y estéril, que camina dubitativo y pretende ser el único ser sobre la faz de la tierra, donde los sentimientos ocupan un segundo plano y las personas un tercero.
Puedo hurgar dentro de mi caja de recuerdos y con gran esfuerzo leer papelitos rotos y amarillentos con los nombres de personas que dejaron una marca en mi vida, pero solo son eso, papelitos gastados…
Por consecuencia a lo antes expuesto, lo que pude identificar como una lagrima, humedeció mi tez reseca y marchita. La seque rápidamente con mi mano izquierda (que era en la que no sostenía el bastón) respire profundo y seguí caminando, con un paso firme…
“SEISU”
Es increíble como una imagen puede ser totalmente diferente si hay algo que se interpone entre ésta y el ojo del observador.
No hace falta que sea algo evidente, es mas de eso se trata, de algo imperceptible y hasta inocente...
Durante largos minutos estuve observando a mi mano dentro del agua cristalina, cómo al zambullirla adentro se volvía rara, un poco más grande y gorda, y si metía hasta el antebrazo parecía partido y fuera de sí.
En ése momento de meditación profunda e infantil, pensé que en la vida ocurría lo mismo, trate de ver si existía ese “agua transparente” que distorsionaba las cosas, si había situaciones que parecían ser de una manera y al final eran de otra, si incluso mis actitudes sufrían un cambio desde que salían de mi ser hasta que llegaban a los demás.
Divague entre recuerdos y pensamientos, algunos bastantes superficiales, debo reconocer, pero otros totalmente llenos de sentimientos y vacios de intenciones. Silencios crepusculares empezaron a despertarse y a traerme aromas de tiempos remotos y felices que ya había sepultado.
En ese momento un frio me recorrió todo el cuerpo, me erizo la piel…me dejó sin respiración.
Empecé a tratar de razonar como había llegado a ése estado, trate de quitar ésa idea que tanto acechaba a mi cabeza, no era la razón por la que estaba aquí, vine a hacer otra cosa…
Inmediatamente recordé ésos días hermosos de sol y éste inclusive…”qué bueno es tener tiempo para meditar un poco en soledad” pensé.
Aunque mis pensamientos se hayan abierto caminos prohibidos y olvidados.
Aunque mis pensamientos se hayan abierto caminos prohibidos y olvidados.
“Sí, evidentemente nunca las cosas parecen ser lo que en realidad son, hasta los sentimientos a veces suelen confundirse y mal interpretarse.” Susurre.
Mi mente otra vez se perdió en recuerdos borrosos y en blanco y negro, volví a pensar en todo el peso que mi espalda tenía que soportar, en las piedras pesadas de la vida que cada individuo debe llevar, fracasos,
derrotas, amigos, familia, etc.
derrotas, amigos, familia, etc.
Una vez más luché y pude sacar ése pensamiento recurrente de mi cabeza.
En ése instante sentí una brisa cálida que refrescaba mi cara sudada y caliente.
Ésa era la señal que necesitaba…
Tomé mi mochila pesada y salté sin dudarlo. “que fresco que me siento ahora” fue en lo último en lo que pensé…
“SEISU”
Suscribirse a:
Entradas (Atom)